Un grave episodio de violencia escolar ocurrido este jueves en el plantel Xoclán del Colegio de Bachilleres del Estado de Yucatán (Cobay) ha encendido las alertas entre la comunidad educativa y padres de familia, luego de que un estudiante presuntamente agredió físicamente a su compañera y posteriormente atacó a un profesor que intentó intervenir.
De acuerdo con testimonios de alumnos que presenciaron los hechos, el joven estudiante habría propinado dos cachetadas a una compañera que —según mencionan— es su presunta novia. La agresión ocurrió dentro del aula, en presencia del grupo, lo que generó desconcierto y preocupación entre los presentes.
Tras recibir las cachetadas, la joven salió rápidamente del salón en evidente estado de crisis emocional. Ante la situación, el profesor encargado del grupo decidió intervenir para proteger a la estudiante y evitar que la agresión continuara. Sin embargo, esta acción provocó que el presunto agresor reaccionara de forma aún más violenta.
Según relatan testigos y de acuerdo con imágenes internas del plantel, el estudiante intentó seguir a la joven fuera del aula, pero al ser retenido por el docente y otros profesores, perdió el control y comenzó a lanzar golpes y patadas contra el maestro. La situación escaló hasta que varios alumnos intervinieron para separar al joven y evitar mayores lesiones.
El hecho causó una movilización inmediata dentro del plantel. Personal directivo solicitó apoyo a las autoridades educativas y de seguridad, quienes ya se encuentran investigando el incidente para deslindar responsabilidades y garantizar la integridad de la comunidad escolar.
Hasta el momento no se ha informado oficialmente sobre el estado físico del profesor ni de la estudiante afectada, aunque versiones preliminares indican que ninguno presenta lesiones de gravedad. No obstante, el caso ha generado preocupación entre padres de familia, quienes exigen medidas más estrictas de prevención y protocolos de atención ante episodios de violencia estudiantil.
La dirección del plantel, junto con autoridades del Cobay y dependencias estatales, trabajan en la evaluación del caso para definir las sanciones correspondientes y reforzar los mecanismos de seguridad y convivencia dentro del centro educativo.