La celebración del 12 de diciembre, una de las festividades religiosas más importantes de México, será más cara este año. De acuerdo con un análisis de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), el costo promedio para acudir a la Basílica o participar en la tradicional peregrinación guadalupana aumentó un 17% respecto a 2024.
El organismo informó que el gasto total para los devotos que buscan cumplir mandas, agradecer favores o simplemente rendir homenaje a la Virgen de Guadalupe puede alcanzar hasta los 2,690 pesos, considerando transporte, flores, veladoras, comida y otros artículos tradicionales. El año pasado, ese mismo gasto rondaba los 2,300 pesos.
Aumentan los precios de lo esencial para la festividad
La ANPEC detalló que varios factores han presionado los precios: el incremento en los combustibles, el alza sostenida en insumos agrícolas y los costos de producción de velas y arreglos florales. Entre los productos que más incrementaron se encuentran:
- Flores: uno de los elementos más emblemáticos de la tradición guadalupana, con aumentos significativos en rosas y arreglos.
- Veladoras y cirios: esenciales para las ofrendas, cuyo precio se elevó por el costo de la parafina.
- Antojitos y alimentos: el precio de tamales, atole y comida típica también registró incrementos.
- Transporte: el traslado hacia los templos, parroquias o hacia la Basílica de Guadalupe ha subido por el costo de la gasolina y tarifas de autobuses.
Impacto en millones de peregrinos
Cada año, millones de mexicanos viajan desde distintos puntos del país para participar en las celebraciones guadalupanas. Para muchas familias, los peregrinajes significan un esfuerzo económico que asumen como parte de su devoción.
Sin embargo, este aumento en los costos representa un desafío adicional, especialmente para quienes viajan desde comunidades alejadas o en caravanas organizadas.
Tradición viva pese al incremento
A pesar de la presión económica, la ANPEC prevé una alta afluencia de fieles este 12 de diciembre, pues la celebración de la Virgen de Guadalupe se mantiene como una de las expresiones de fe más arraigadas en México.
Los comerciantes recomendaron a los peregrinos planificar con anticipación, comparar precios y evitar compras de último momento para reducir gastos.
