Círculo Rojo
Por: Iván Duarte
El anuncio de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de congelar 12 mil cuentas bancarias, parece ser insistente en el mensaje que la Presidencia de la República quiere enviar a los empresarios; ¡paguen o ya verán!
En plena contingencia, que ya ni se diga la cuota en salud que está cobrando el Coronavirus, pues es evidente, la necesidad de estímulos fiscales parece ser cada vez más distante. La mentada segunda reunión que esperaban los capitales del país, durante la ya transcurrida quincena de abril no refleja algo contrario.
No así los indicadores de la UIF, que ya colocan el dedo en el renglón de las operaciones ilegales o presuntamente ilegales, ya que, cuando sean señalados por la dogmática 4T, solo los neófitos podrán salvarse. Aquellos que se arrodillen y reconozcan al mesías en Palacio Nacional.
¿Y qué tiene que ver esto con Yucatán?
Bueno, la misma UIF colocó a esta entidad, principalmente a Mérida, primero en enero en la posición número 19 de 20 enlistadas desde donde se había reportado denuncias por presuntas operaciones bancarias irregulares.
Posteriormente ya para febrero, último reporte publicado por la unidad, la ciudad ya se observa en la posición número 16. Aunque Edomex y Jalisco repiten en varias ocasiones con diferentes ciudades, y podemos decir que Mérida está en la posición número 11, si no repetimos ciudad por entidad.
504 denuncias entre enero y febrero del 2019 y ahora mil 478 entre los mismos meses pero de este 2020 en curso.
Esto específicamente es “etiquetado” por Hacienda como posible actividad ilícita en donde se involucra desde luego, el lavado de dinero. Con mención clara de participación y vínculo con el narcotráfico. Claro sospecha hasta que se demuestre.
Hablando un poco del chisme y el rumor que ronda en nuestra Ciudad Blanca, seguramente usted habrá escuchado en reiteradas ocasiones que Yucatán es tierra de tregua, donde el crimen organizado manda a sus hijos a estudiar, o bien, a sus familias a vivir.
Bien, de acuerdo con un reporte realizado por la extinta Policía Federal, de nueve carteles del crimen organizado existentes en el país, cuatro tienen presencia en la Península de Yucatán. Dos en Campeche, el Cártel de Sinaloa y el del Golfo. Los cuatro en Quintana Roo, el de Sinaloa, del Golfo, los Zetas y el Cártel de Juárez. Y por último Yucatán, con presencia de uno, el del Golfo.
Si tomamos esta descripción como el móvil perfecto para atribuir cuando sea el caso la relación empresario-cártel, ¿quién podrá ser libre de pecado a los señalamientos de la autoridad federal, cuando a está así convenga?
Tan fácil que sería, acusar a cualquiera, de que en su haber tiene movimientos extraños y sospechosos, y que tenga relación con alguno de estos grupos criminales. Ah, y ni se diga de las finanzas de gobierno. ¿No podrían también achacarles el mismo pecado?
La UIF no para ahí, Mérida aparece también como la sexta ciudad con operaciones relevantes con la Banca Múltiple, con una cifra de 14 mil 937 millones de pesos que han llamado la atención de su titular Santiago Nieto, quien dijo “se acabó la fiesta”.
Mérida también es la ciudad número 10 en cuanto al reporte de movimientos superiores a 10 mil dólares estadounidenses con 12 mil 393 reportes registrados hasta el 29 de febrero pasado.
No es la ciudad más destacada desde luego, pero entre las que están en la lista de “candidatas” de Hacienda Federal, para que cuando así convenga, como ya dijimos, sean acusados de corruptos y criminales. ¡Aguas empresarios!, ¡aguas gobierno!, no les vayan a estar armando la camita.