Maestro y Cronista de Eventos Culturales en Yucatán

Cuando consideramos la importancia de la cultura en la educación, visualizamos que cada región cultural se mueve dentro de un marco de conceptos y de prácticas; el deber de la educación es transmitir a las futuras generaciones dicha cultura, valorando los conceptos y las prácticas que van a necesitar cuando sean adultos.
En este punto, es cuando podemos hablar de la trayectoria de Antonio Marín y Aguilar, Maestro de Educación Primaria y Licenciado en Ciencias de la Comunicación, quien comprometido con el acervo cultural de nuestra región, empalmo desde un principio, los conceptos y las prácticas culturales, siempre acorde a los tiempo, sin caer en lo estático, en una sociedad cambiante.
El Profesor Antonio Marín, es originario de la “Sultana del Oriente”, la Ciudad de Valladolid; lugar que lo vio crecer hasta concluir su educación básica. Debido a su interés de seguir preparándose, decide viajar a la capital yucateca, para estudiar su preparatoria en la Universidad del Sureste, lo que actualmente es la Universidad Autónoma de Yucatán, (UADY).
Tiempo después, con el apoyo de sus padres viaja a la Ciudad de México, para estudiar en la Escuela Nacional de Maestros, y paralelamente ingresar a la Universidad Nacional Autónoma de México, (UNAM), en la carrera en Ciencias de la Comunicación.
Comenta: —“Provengo de familia de maestros, mi madre era maestra; creo que por herencia o imitación, decidí formar parte del magisterio, el cual me apasiona, que durante el camino aprendí a transmitir los conocimientos necesarios para formar a las futuras generaciones”.— Concluye.
En primera instancia ingresa a la Escuela Nacional de Maestros, como docente de educación primaria y dos años después obtiene su título de Licenciado en Ciencias de la Comunicación.
Inicia su primera etapa laboral como docente en el Puerto de Veracruz y posteriormente obtiene un cambio geográfico, lo cual lo hace trasladarse a la capital del Estado de México, Toluca, área metropolitana, que le permite desarrollar su talento en la comunicación.
Posteriormente a su jornada laboral como docente, por las tardes recibe la oportunidad de trabajar en la empresa “Colgate, Palmolive”, en el Departamento de Publicidad, teniendo el espacio de interactuar en ámbito televisivo, teatral y radiofónico; conviviendo con grandes artistas de gran renombre de su época.
Tiempo después contrae nupcias con la Maestra Marisol Cardín Durán, con la que viaja a la ciudad de Monterrey, para laboral en el ámbito educativo por un periodo largo de dos décadas.
Con el propósito de seguir preparándose, estudia la Maestría en Docencia: “Lengua y Literatura Españolas”, el cual concluye con gran satisfacción.
El deseo de regresar a su tierra natal, lo trae de vuelta a Yucatán, con un horario bastante ocupado, ya que por las mañanas imparte clase de primaria, por las tardes la materia de Lengua y Literatura españolas en la Secundaria Técnica No.5 y por las noches es locutor de radio.
En el ámbito radiofónico, inicia su carrera en el Grupo Rivas y poco tiempo después en el Sistema Radio Yucatán, lo que hoy es Raza en la XEPY; con un programa muy querido por la gente, de gran “rating”, ya que el espacio, no solo se limitaba a entrevistas y programación de canciones, adicionalmente realizaba capsulas informativas y culturales de nuestro estado.
En 1985 recibe la oportunidad de trabajar para el Ayuntamiento de Mérida como Maestro de Ceremonias del Cabildo.
Ese mismo año, se crea “Mérida en domingo”, tres años después, es invitado a ser conductor de las vaquerías, siendo hoy en día uno de los precursores del espectro cultural que turistas y meridanos disfrutamos en el primer cuadro de la ciudad.
En 1988 se crea el programa de “Serenatas Yucatecas”, en el parque de Santa Lucia, donde cada jueves, el maestro Antonio lleva presentándose 29 años de manera interrumpida, conduciendo dicho programa y que sin duda es un espectáculo referente de la historia de la vida nocturna de esta capital.
El 16 de septiembre de 1997, crea el programa de “Noches Mexicanas”, en el remate de Paseo de Montejo, donde de igual manera conduce, cada sábado por la noche.
Después de 35 años de servicio docente, en el año de 2003 se jubila.
Actualmente ostenta el cargo de Coordinador de Cultura, en el Ayuntamiento de Mérida, mismo cargo que ha ejercido durante diez gestiones municipales, en el transcurso de 30 años.
Se puede catalogar a Antonio Marín, como hombre honesto, maestro por vocación, comprometido con la preservación de nuestras raíces culturales, magnifico escritor de música regional y excepcional cronista cultural.
La entrevista concluye con la siguiente expresión: “Darle a la educación la importancia que se merece, docentes con vocación, como lo fue en su tiempo un servidor; que en sus venas corre la sangre de comunicador, que día a día busco nuevas formas y estilos de agradar a la gente, a la audiencia”.