La Pandemia del Covid-19 ha golpeado también a los medios de Comunicación en Yucatán

Sin duda, la pandemia ocasionada por el Covid-19 se ha encargado de dar “muerte” a negocios en general. Las empresas formales no se quedan atrás, tan así, que los medios de comunicación en Yucatán han sufrido un golpe bajo y les ha costado a los empresarios recuperarse.
En lo económico, humano e incluso en lo familiar, es donde se han visto afectadas las empresas radiofónicas y de medios masivos en general.
Un declive y una fragmentación es el común denominador en dichas compañías, sobre todo en las radiofónicas y televisivas.
Empresas como Grupo Rivas, por ejemplo, a través de lazos familiares fragmentados, han sufrido una caída casi total, tan así que los pleitos entre parentescos, sumado a malos manejos económicos y malos tratos con el personal, ha traído como consecuencia que la tradición en comunicación podría pasar a la historia.
Pero ¿quién o quienes son los responsables de estos malos momentos?
Según nos comentan Alejandro Rivas Pintado, Directivo de “Grupo Rivas” empresa radiofónica al punto del colapso, será el responsable de la catástrofe que “enlutaría” por completo a toda la dinastía. Sin embargo, distintos pleitos entre él y sus familiares serían la cereza en el pastel.
Vale aclarar que sin ser el director general de la empresa, se ha encargado de prácticamente llevarla a la ruina, situación que más adelante explicamos.
Es bien sabido que Grupo Rivas, hasta hace cinco años atrás, era una empresa totalmente sólida, lo que permitía grandes oportunidades para sus trabajadores, así como en muchas otras compañías del medio.
Sin embargo, con la retirada parcial de Don Rafael Rivas, padre de Alejandro, y las disputas entre todos los Rivas, ha ocasionado que la plusvalía que emanaba el apellido en el mundo de la comunicación se vaya poco a poco por la borda.
Es importante mencionar que Rivas Pintado, lo que últimamente ha ofrecido a sus trabajadores es: de acoso laboral, abuso de autoridad, explotación laboral, malos pagos e incluso malos tratos.
Principalmente los que dan voz a sus estaciones, son los que han pagado la mayoría de los platos rotos.
Alejandro Rivas, a muchos de ellos les debía hasta hace meses, prestaciones de ley; otros han sido liquidados de manera injusta y un tanto más sufren de las agresiones labores por parte del injusto y falso empresario, quien se la pasa autoalabándose cuando en su empresa se vive el infierno total.
Todo eso sucede detrás de los micrófonos, lo que los radioescuchas no saben y desconocen. Es decir, los locutores tienen que sacar su mejor versión, aún con las calumnias que Rivas Pintado les hace.
El directivo de Grupo Rivas, presume sus cargos empresariales: Vicepresidente Enlace Legislativo de la CANACOME; Asesor en CANACINTRA; Consejero en COPARMEX Valladolid y Tesorero del CIRT Yucatán.
Todas aquellas “medallitas” se las ha colgado, mientras que su empresa se cae a pedazos.
Repetimos: los problemas en las empresas de comunicación encrudecieron con el coronavirus, algunas, como la empresa varias veces citada, les ha ido de mal en peor.
Esperamos que con el paso del tiempo, y que la misma recuperación post-pandemia, logre levantar el declive en los medios masivos de comunicación, o al menos, permita recordar con buenos ojos lo que alguna vez fue tradición en comunicación.