Sin recovecos
Por Rafael R. Vega Valladares
“La indicación del gobierno federal es aceptar a todos los pacientes y los pongan donde sea… el Presidente no quiere que se diga que se mueren en la calle o los están dejando morir, así que tengan o no espacio, haya o no personal, tienen que atender a los pacientes…” se oye la voz en una grabación que se asegura es de una funcionaria del Instituto Mexicano del Seguro Social y que podría ser “fakenews”, pero que ninguna autoridad de la dependencia se atreve a desmentir.
Una nueva versión de un paciente con Covid que no es recibido en hospitales se viraliza en las redes junto con quejas de que no hay espacio en los hospitales mientras el gobernador asegura que se ha informado a las autoridades del IMSS que sí hay capacidad en sus clínicas y no deben cerrarle las puertas a nadie.
Personal médico que está enfrentando la batalla más fuerte que se haya imaginado en sus vidas clama ayuda porque enfrentar al Covid implica ocho horas enfundados en un traje con varias capas de protección, sin poder ir al baño, y atender hasta 24 pacientes en una jornada que los tiene ya estresados, exhaustos, agotados, hartos.
Presiones internas obligan a remover al director del hospital Juárez del IMSS donde se viven fuertes conflictos por la falta de personal, insumos y ya de espacio en sus hospitales.
Hay 3,171 trabajadores de salud de licencia gracias a un decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación que otorga permiso a los que tengan 60 años o más, o con enfermedades crónicas, que permanecen en sus hogares con goce de sueldo a fin de evitar el riesgo de contraer este virus.
Los que sí están trabajando exigen a sus sindicatos que esas personas con licencia mejor se jubilen y dejen sus plazas vacantes a quienes sí puedan ahora hacer frente al Covid.
Del total de trabajadores 1,800 pertenecen a la Secretaría de Salud de Yucatán; 532 son de la delegación local del Issste y 683 del IMSS, así como 156 del Hospital de Alta Especialidad.
Hay que sumar además a los que se han enfermado y a los que han perdido la vida en la batalla contra la pandemia.A los conflictos del IMSS se agrega la inconformidad de médicos familiares que ahora tendrán que prestar sus servicios en las áreas Covid.
En medio de estas cifras, cientos de personas escriben en sus redes sociales que se decrete el semáforo rojo, pero cada vez salen más personas al centro, a los restaurantes y ya son más comunes las reuniones “familiares” o de “sólo amigos muy cercanos”.
Lo mismo se responsabiliza al secretario de Salud, al gobernador o al Presidente, pero pocos reconocen que todo esto fue advertido hace tres meses: si no nos cuidamos van a colapsar los hospitales, se decía.
Cierra una semana, del sábado 4 de julio a este viernes, con cifras de muertes diarias que no bajaron de 15 y 16 personas, y casos de contagios de entre 150 y 180 pacientes nuevos.
Viernes en la noche, Hugo López Gatell, el super subsecretario de Salud Federal, suma a las alarmas de esta semana al decir que la epidemia está descontrolada en Mérida y presenta cifras de la semana 26 cuando vamos en la 28, de modo que las circunstancias ya cambiaron.
Para colmo, el boletín del gobierno del Estado intenta aclarar ese dato y no menciona al funcionario, sólo se refiere a él como “las autoridades de salud federales”.
Así no aclara nada.En el Congreso del Estado, diputados del PRI y Morena le niegan a los ayuntamientos de Mérida, Progreso y Umán sendos préstamos con los que pensaban realizar obra pública y reactivar la generación de empleos.
En resumen, los contagios crecen, los hospitales se saturan, López Gatell pone a Yucatán de cabeza con cifras de hace dos semanas, renuncia el director del hospital Juárez y niegan créditos a ayuntamientos panistas.
Yucatán, de la pandemia al pandemónium*.*pandemónium, pandemonioDefinición:
1.Reunión de demonios.
2.Lugar en el que hay gran confusión, ruido y griterío.