Uber y el Imperio FUTV
Círculo Rojo

Círculo Rojo Mérida, Yucatán a 29 de febrero de 2016 Por: Iván Duarte Como si se tratara de Luke Skywalker contra Darth Vader, el inminente arribo de la plataforma Uber a Mérida, ha puesto en sobre aviso y defensiva al Frente Único de Trabajadores del Volante (FUTV) quienes pese a todo su esfuerzo no lograron dejar fuera de Yucatán a esta nueva opción de servicio de transporte. Insisten sin embargo en atacar y en días pasados lanzaron la aplicación “Mi Taxi”, que permitirá ver la fotografía del chofer y la ruta destino para generar confianza y alerta a las autoridades de seguridad en cuanto este se salga de ruta. Aplicación casi idéntica a la de la Plataforma Uber, con la única diferencia de que Uber sólo realiza cobros del servicio a través de tarjeta de crédito y débito, y nada en efectivo, mientras que Mi Taxi, si permite el cobro en efectivo. Hasta aquí con la competencia que está generando esta nueva opción. Vayamos al verdadero problema. Pese a las reiteradas veces que la Dirección de Transporte de Yucatán (DTEY) ha jurado y perjurado que no existen o que rara vez se han dado las quejas por abusos en el servicio de taxi, los usuarios enfrentamos equis cantidad de irregularidades a la hora de hacer uso de uno. Completamente comprobado es que los días festivos como 24, 25, 31 de diciembre luego de las seis de la tarde ya no existe el taxímetro, y te cobran el servicio acorde a la distancia a donde vas. (de acuerdo al sapo la pedrada), con cuotas que está demás decir que son elevadas. Esto con el pretexto, y no decimos que no sea cierto, de que en la empresa del Frente no se paga aguinaldo a los trabajadores. Innegable es también que en festejos como plaza carnaval, la Feria Xmatkuil y algunos conciertos de gran relevancia, especialmente los amigos del FUTV, tiene exclusividad del servicio, lo que hace que las otras líneas o empresas no puedan recoger gente en esos lugares, solo llevarlos de otro punto al lugar del concierto. Esto para beneficio de la gente del FUTV que les permite realizar cobros en modalidad “Turista”, pues muchas veces sólo por sacarte de Xmatkuil y llevar al centro te cobran casi 300 pesos. El arribo de Uber representa lo que aparenta ser una futura masacre del control del servicio de taxis en la entidad, en donde pululan al menos cinco empresas diferentes de este servicio, y sin contar a al menos dos empresas de servicio no regular (por no decir pirata) que por cierto apenas empiezan a ganar confianza entre la gente por tener costos mucho menos elevados que el taxi convencional. El caso específico Uber y haciendo un breve análisis sobre la nueva plataforma, en Jalisco pese a ser una opción que deja satisfechos a los usuarios por sus bajos costos, también ha generado conflictos en esa entidad. Con los tapatíos existe una oferta de 15 mil taxis convencionales en la ciudad de Guadalajara, y cuando recién llegó Uber los socios colocaron seis mil nuevas unidades de esta plataforma. Con el tiempo y ante lo redituable de la competencia ganándole espacios y preferencia al servicio convencional, la plataforma decidió en lugar de cobrarles el 20 por ciento a los socios, el 25 por ciento, además de que el ahorro para los usuarios que representaba un 22 por ciento, descendiera por decisión de la misma plataforma a un 25 por ciento. Con ello los choferes y los socios de la plataforma han visto mermadas sus ganancias, y de seis mil restarán unas cuatro mil unidades en toda la ciudad. Amén de que la compañía mayoritaria no les deja cargar pasaje en determinados puntos de la ciudad que son muy concurridos, como el aeropuerto y por lo cual los choferes de Uber se han ido a protestas exigiendo principalmente se regularice el cobro de su servicio, o más bien, las tarifas a cobrar. Lo importante aquí amable lector, es que siempre será sana la competencia, en especial si usted un 24 de diciembre por la noche desea dirigirse a algún punto de la ciudad, sin la duda de cuanto le costará o mejor dicho cuanto le cobrará el taxista por llevarle a otro lugar. ¿No lo cree?… Iván Duarte Ver más de Iván Duarte