
“Plan Maestro Ucú”

Sin Titubeos
Mérida, Yucatán a 26 de febrero de 2016
Por: Roberto Ojeda
¿Qué es lo que pasa en nuestros municipios? Esa es una pregunta que surge ante las noticias que hemos vivido en Yucatán durante las últimas dos semanas, lapso de tiempo en el que pasamos de descubrir que en siete de nuestras localidades, sus autoridades que deben llevarlas por el camino del progreso prefirieron robarles 26 millones de pesos, hasta enterarnos que hay un municipio que es propiedad de un particular.
Durante muchos años los yucatecos sabemos cómo un secreto a voces que los municipios del interior del estado se manejan como negocios familiares, con alcaldes que meten a la administración pública hasta a su perro y que luego dejan como sus sucesores a sus esposas, madres, hermanos, hijos y hasta compadres en el poder como si fuera un derecho divino. Que cuando un presidente municipal termina su periodo, aprovecha los últimos meses para llevarse hasta las plantas del palacio municipal y dejarle a sus sucesores las arcas en cero.
Pero que un municipio como Ucú sea propiedad casi en su totalidad de un tal Manuel Alberto Guillermo Molina, hermano de un tal Juan Pablo Guillermo, delfín político de un tal Roberto Borge, es el colmo; que el municipio de Progreso siga pasándose por el arco del triunfo el manejo adecuado de residuos sólidos y este a punto de contaminar todo el manto freático de Yucatán, es el colmo; que Kanasín tenga todos los problemas que pueda tener un municipio, calles con baches, falta de alumbrado, inseguridad cada vez a la alza, y a sus ciudadanos con el Jesus en la boca todo los días porque no saben si al día siguiente los asaltan o les da el chikungunya, es el colmo.
Estamos en un punto en el cual debemos exigir más, mucho más de nuestras autoridades. La diferencia entre Mérida y el resto de los 105 ayuntamientos es enorme, (sin que tampoco la comuna meridana sea un ejemplo de limpieza, si no que le echen un ojo al Comité Permanente del Carnaval) y así es imposible salir adelante como estado.
En este tema el Gobierno yucateco a través de Roberto Rodríguez Asaf se equivoca al deslindarse del tema de la donación de terrenos en Ucú, ya que aunque parezca un municipio de Quintana Roo, los terrenos siguen estando en Yucatán.
También se equivocan los partidos políticos al seguir solapando autoridades corruptas, prepotentes e inútiles, como lo hace el PAN con Evelio Mis y su hija Natalia o el PRI con Carlos Andrade Muñoz, a quienes si no los meten a la cárcel por desvío de recursos seguro los veremos en algún puesto público más adelante.
Se equivocan los diputados del Congreso del Estado al no presionar y realizar reformas de ley que les permitan fiscalizar de forma más efectiva las arcas públicas de la administración estatal como de todos los municipios, por temor a que se les volteen en su contra y que ya no les permitan ejercer sus jugosos negocios bajo la mesa.Y por supuesto se equivoca el Gobierno Federal, ya que si va a regalar terrenos, al menos que lo haga como dicta la tradición, el 25 de diciembre y con un moño, se lo pido de favor.
Por último mencionar, que por fin, ya sabemos a que se referían con aquello del Plan Maestro Ucú. Quién lo iba a decir…
Atentamente: “El hígado de aquel que escribe”.
Roberto Ojeda
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