Umán, Yucatán.- La comisaria del ejido de Itzincab, Ana María Caamal, enfrenta serias acusaciones por parte de pobladores, quienes la señalan de presuntamente abusar de su poder al vender tierras ejidales sin repartir el pago correspondiente a los ejidatarios. Además, denuncian que ha utilizado la sede de la comisaría para comerciar comida, lo que ha generado malestar en la comunidad.
Según testimonios de los afectados, la comisaria obligó a varios ejidatarios a firmar documentos para la venta de terrenos, bajo amenazas de represalias. Uno de los denunciantes, quien prefirió mantenerse en el anonimato, aseguró que durante el mes en curso se realizó una venta de tierras sin que los ejidatarios recibieran el pago proporcional que les corresponde.
*”Ella nos intimida, nos dice que si no firmamos puede usar sus contactos políticos para perjudicarnos”,* expresó uno de los afectados, quien teme represalias por parte de la autoridad local.
Este tipo de prácticas, en las que los comisarios ejidales venden tierras sin cumplir con los pagos acordados a los ejidatarios, ha sido recurrente en la región. Los afectados señalan que la intención es quedarse con una mayor parte del dinero obtenido por la venta de los terrenos, dejando a los legítimos propietarios sin lo que les corresponde.
La comunidad de Itzincab exige una investigación a fondo y justicia para los ejidatarios que han sido perjudicados por estas irregularidades.
