“La vida perfecta”

El aborto, palabra común hoy día en nuestra sociedad y donde tal pareciera, que ese acto, el de abortar, es la única salida que tienen las muchachitas, cuando se ignora que esa acción es algo con lo que tendrás que vivir toda la vida, ya que tener un hijo es un regalo que Dios y la vida nos da.
El asesinato del embrión es un delito (sí, lo digan las leyes o no). Y el que lo practica y se permite practicarlo un delito comete. En la religión Católica abortar es un pecado mortal. Es matar a alguien sin importar si es o no nacido.
Aunque para muchos un feto no puede considerarse una vida durante las dos primeras semanas de gestación, erran, porque la misma ciencia ha demostrado la existencia de vida desde la fecundación.
Inexplicable es como algunas jóvenes se intimidan ante las presiones sociales, incluso médicas que las aterran con los riesgos de los partos, que desde luego deben existir, pero al mismo tiempo no es una generalidad.
El dar a luz un nuevo ser cambia la vida de una mujer. Es sentir y ver crecer una personita dentro de tu vientre. Es algo maravilloso e inexplicable. Pero en fin no todas las personas piensan así.
Sin afán de acusar y señalar a todos, en especial a las más jóvenes, tal vez esta lamentable opción existe debido a la pérdida de los valores, en especial entre la juventud.
Tal vez nuestra culpa sea pensar solo en fiestas, drogas, borracheras, cigarrillos en fin. Muchas veces, ese efecto de libertinaje les lleva a vivir al cien, sin pensar en las consecuencias, una de ellas, el embarazo. No dudo de otras personas que lo hacen por un acto de “amor verdadero”, aunque tener relaciones no es la única manera de demostrar un acto de amor.
En lo efímero de la juventud, la edad de la ilusión, en ocasiones no se piensa que despertar la sexualidad, las puede llevar al abandono. Cuando ni uno ni el otro son lo suficientemente maduros para enfrentar esa responsabilidad. Significa dejarlas a su suerte, y es cuando ellas piensan en lo más fácil, deshacerse del único inocente de ese error cometido por dos.
Si esa es tu situación. No temas en tener a esa personita que crece dentro de ti. Él o ella esperan un futuro contigo. ¿Qué importa si eres madre soltera? Ten el valor de ver tu vida no como un fin, sino como un principio. Cambia tu vida para un bien.
Por: Angélica Che